Al momento de lidiar con el acné es importante tener en cuenta los alimentos que benefician la piel y los que hay que evitar. Aunque una buena alimentación puede contribuir en el proceso, recuerda que hay muchos factores por los que el acné se presenta: la genética, cambios hormonas, el estrés, sudoración excesiva, productos de skincare inadecuados para tu tipo de piel, la contaminación y el uso de los tapabocas. Es ideal que consultes con un dermatólogo para que te guíe adecuadamente en el procedimiento.
Alimentos que debes evitar o moderar
El chocolate es un alimento rico en azúcar, por lo tanto, es mejor optar por opciones con mayor porcentaje de cacao. Alimentos grasos como las carnes rojas, frituras y comidas rápidas y congeladas se pueden moderar en una dieta balanceada.
El exceso de pan, galletas y dulces no son los mejores aliados para tu piel, igual que los lácteos. Te recomendamos reducir su consumo, pero ten presente que la leche descremada y semidescremada afectan mucho más que la entera.
No está de más decir que el consumo de alcohol regular tampoco es lo recomendable.
Alimentos que benefician tu piel y disminuyen el acné
No todo son prohibiciones. También hay productos ricos en fibra, omega 3 y diferentes vitaminas que puedes incluir en tu alimentación diaria. Los carbohidratos integrales como el arroz, la harina y la pasta, junto con la quinua y la avena son alimentos abundantes en fibra. La sardina, el atún y el salmón contienen omega 3, como las semillas de linaza y chía. En cuanto a la Vitamina A la zanahoria, papaya, espinaca, yema de huevo y el mango son ideales, y la Vitamina C y E están el limón, brócoli, aguacate y la naranja.
Puedes incluir frutos secos como las avellanas, nueves, almendras, el marañón, maní y los pistachos. Carnes bajas en grasa (pescado, pollo, lomo de cerdo) son la mejor proteína. El yogur natural es bastante aconsejable.
Es fundamental complementar estos alimentos con 2 a 2.5 litros de agua por día para hidratar la piel y favorecer el proceso de cicatrización, el uso de productos cosméticos específicos y la práctica de actividad física para un mejor control del azúcar en la sangre, producción hormonal del organismo y reducir la oleosidad en la piel.
¡Y no olvides utilizar crema solar con protección UVA y UVB!